Casualidad o destino


Duuuuuuulce gatiiiiiiito, parece una bola de pieeeeeeeeel

Hubo un tiempo, no tan lejano, en el que el concepto música no era fácil de concebir sin su correspondiente soporte físico. Éste a su vez, era difícil de concebir sin toda una parafernalia de información, diseño, texturas y olores. Sí, sí; no solamente se degustaba el sonido que acompañaba el soporte, sino que al abrirlo, se disfrutaban  los olores, se admiraba el diseño como si de una obra de arte se tratase (en algunos casos efectivamente así era) y se leía toda la información que en forma de libreto o funda interior acompañaba el soporte con cuidado y curiosidad. Gracias a ello se descubrían importantes secretos, como quién era la persona responsable de esos sonidos tan particulares: el productor. Con el tiempo, llegabas a entender los hilos que se extendían de manera invisible y que conectaban casi mágicamente a artistas, grupos y géneros.

Nuestro protagonista de hoy es Brian Eno, uno de esos grandes e influyentes productores, desde los lejanos años 70 y aún hasta nuestros días. No en vano, New Musical Express le considera el séptimo productor más influyente de la historia de la música. Más abajo puedes ver una pequeña selección de los trabajos que ha realizado para otros artistas.

Pero si por algo quiero hablarte de Brian Eno es más por su faceta de pionero. Imagínate que de una equivocación surge una idea que cambia el resto de tu vida. Más allá incluso. Imagínate que esa equivocación empieza a dejar huella a tu alrededor, incluso en tu entorno, incluso en el mundo. No, no voy a hablarte del moho que hizo que Alexander Fleming descubriera la penicilina. No tendría cabida en este blog donde pretendo hablar de música... a no ser que el científico estuviera tarareando "We are the robots" mientras realizaba el descubrimiento y aun así igual quedaría un poco forzado.

Todo empezó cuando, en su estancia en un hospital con una pierna rota, se levantó con mucho esfuerzo de la cama para poner un disco de música de harpa del siglo XVIII en un plato (de los que se usan para poner discos, no croquetas de jamón). Cuando volvió a la cama y la música empezó a sonar, se dio cuenta que el volumen estaba demasiado bajo y también que no se encontraba con fuerzas suficientes para volver a levantarse para enmendar el problema, así que decidió dejarlo tal cual. Lo que hace la pereza: se dio cuenta que era una nueva forma de concebir la música; ya no en un primer plano, sino como una parte de un todo, como parte del ambiente que le rodeaba, junto a la luz, los olores... Mágico momento: acababa de nacer la música ambient entre vendas, gasas y tiritas.

La carrera musical de este escocés se ha movido delicadamente por los empantanados terrenos de la experimentación en el pop-rock y la música ambiental. Ambient, esa ha sido su gran aportación al mundo de la música y de hecho se le atribuye la acuñación del propio término que le da nombre. ¿Has escuchado música ambient en alguna ocasión? Seguro que sí, aunque no lo hayas hecho conscientemente. Brian Eno, es a la música ambient, lo que Chuck Norris al cine de acción.  


1977. Ultravox. Co-productor.

  
1976-1979. Trilogía de Berlín. Low, Heroes y Lodger. Productor.


1984. U2. Unforgettable Fire. Co-productor.


2000. U2. All that you can't leave behind. Productor y teclados.


2011. Coldplay. Mylo Xyloto. Co-productor.

Como guinda a todo este pastelón, la canción de Brian Eno que probablemente más veces haya sonado... ¿Sorprendido?



Comentarios

  1. Venga yaaaaa!! La canción de Windows?? Qué bueno! Nunca lo había pensado pero sí que es ambient total!!

    Por cierto: "Brian Eno, es a la música ambient, lo que Chuck Norris al cine de acción" WTF??? ;)

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    1. Jajajajaja. Estoy empezando a pensar que esa frase va a traerme complicaciones. Era un poco de sarcasmo; todos saben que el más grande es... Jean Claude Van Damme :)))

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