El primer hit de la música electrónica: Autobahn


La historia de la música electrónica está construida a base de pequeños grandes hitos que van marcando y condicionando su evolución, como ocurre en el fondo con cualquier de las múltiples facetas de la historia. Más allá de si son los padres, los abuelos o los bisabuelos de la música electrónica (calificativos más que desgastados de tanto oírlos), lo que es indudable es que Kraftwerk han contribuido con un buen puñado de estos hitos, colaborando de manera definitiva, a que la música que hoy en día suene como lo hace.

En este paso de baile de hoy, nos centraremos en uno de estos geniales hitos. El que puede considerarse como el primer gran disco de música conceptualmente electrónica y en todo lo que rodeó su concepción artística global, ya que, como ocurre con cada disco de Kraftwerk, no es únicamente una colección de canciones.

Publicado en 1974, fue el cuarto disco publicado bajo la marca Kraftwerk. Pero a su vez, fue el primero de los seis discos de la época dorada de la banda, en la que el dúo original, Ralf Hütter y Florian Schneider, incorporaron a los otros dos componentes de la considerada formación clásica: Karl Bartos y Wolfgang Flür. Sin duda su época más productiva y que finaliza doce años después, en 1986 con el disco Electric Café.

La razón de la incorporación de Karl y Wolfgang, fue el relativo éxito cosechado con su anterior disco, titulado en un ejercicio de onanismo musical "Ralf & Florian". Ésto les permitió hacer alguna actuación en televisión en las que los miembros originales, deseaban aparecer como una banda sólida.

La confusión que les hizo triunfar en Estados Unidos.

Vale, es un disco rompedor, genial, no hay ninguna duda. Pero si consiguió entrar en el olimpo de la música, fue gracias a una confusión. Sí, una confusión de lo más curiosa y rocambolesca. En Estados Unidos el estribillo "Wir fahrn, fahrn, fahrn auf der Autobahn", les sonaba fonéticamente muy próximo al "Fun, fun, fun" de los Beach Boys y dedujeron que era un homenaje al tema del grupo americano, uno de sus grupos más queridos por cierto. El resultado fue la consecución de un rotundo éxito en el país norteamericano, sin duda algo nada fácil en una sociedad tan cerrada a las influencias europeas.

En realidad, según las propias palabras de Ralf y Florian, esa no fue su intención. La inspiración les vino conduciendo plácidamente por sus adoradas autopistas alemanas. No en vano, en esa época  eran unos enamorados de los automóviles.

Conducimos por la autopista
Un amplio valle se encuentra ante nosotros
El sol brilla con un rayo brillante
La superficie del camino es una banda gris
Rayas blancas, bordes verdes

Como puedes comprobar las letras sin duda, nunca ha sido uno de sus fuertes.

El caso es que como consecuencia de este inesperado éxito en Estados Unidos, comenzaron a ser reclamados de manera insistente, lo que les llevó a realizar una gran gira por sus tierras. Para apoyar la promoción, se diseño un póster en los que se anunciaban como The Man Machine, nombre que años más tarde utilizarían en su disco de 1978.


La primera batería electrónica.

Rebobinamos de nuevo al año 1973. Ralf, Florian y Wolfgang (Karl todavía no se había incorporado), se encontraban ensayando en su icónico Kling Klang Studio, preparando la actuación que iban a realizar en la cadena ZDF en su programa Aspekte. Hay que recordar que las nuevas incorporaciones tenían como objetivo dar una imagen de solidez en el escenario y en concreto la labor de Wolfgang Flür era la de tocar la batería. Mientras ensayaban, a Wolfgang le llamó la atención una caja de ritmos  que reposaba en una esquina sin más utilidad que la de recoger polvo.

La caja de ritmos, tenía ritmos programados y sonidos individuales que se disparaban pulsando una serie de botones. Ésta última característica fue la que llamó más la atención del batería y estuvieron ensayando con la caja de ritmos como si de una batería se tratase, pero claro, con bastante más incomodidad, ya que tenía que disparar los sonidos golpeando con sus dedos. A Wolfgang se le ocurrió separar los cables de los conectores y llevarlos hacia otros conectores metálicos más grandes montados sobre una tabla, intentando reproducir una batería tradicional. Había nacido el primer drumpad. Años más tardes Wolfgang descubrió que Ralf y Florian habían patentado bajo su propio nombre el invento.

La actuación en el citado programa fue toda una revolución y sin duda el drumpad fue uno de los grandes atractivos de su actuación del tema "Tanzmusik", precisamente del álbum anterior a Autobah: "Ralf & Florian".



Esta invención fue incorporada en la grabación del disco Autobahn.

La parte gráfica, la aportación del quinto Kraftwerk. 

Efectivamente, ya hemos dicho que Kraftwerk concibe su obra como arte total, no se limitan únicamente a poner un conjunto de canciones dentro de un disco, sino que también se preocupan de la parte visual. Es aquí donde entra en acción Emil Schult  quien por cierto, firma como coautor de la letra del tema que da título al disco. Te has lucido Emil.

El diseño de la carpeta del disco, no estuvo exento de curiosidades. Para la fotografía de la contraportada, Ralf y Florian habían planeado fotografiar a los componentes del grupo en la parte trasera de un coche. Como no estaban muy convencidos de la continuidad de Wolfgang, hicieron la fotografía pero con el propio Emil (sí amigos, así se las gastaban nuestros amigos).

En algún momento decidieron que Wolfgang iba a permanecer y dado que no había tiempo para hacer nuevas fotografías, hicieron que el propio Emil hiciera un montaje, para sustituir su cara por la de Wolfgang. Puedes observarlo en la imagen, el primero empezando por la derecha, sin duda con un resultado bastante tosco. 


La tecnología alemana reñida con la comodida

En cuanto a la portada, existen dos versiones. En la primera se ve la autopista, como ya se ha comentado, obra de Emil Schult. La segunda, más minimalista, con la señal de tráfico de la autopista, ideada por el equipo gráfico del sello Vértigo.

Como curiosidad, en la primera edición alemana, se puede ver los mandos del conductor y un espejo retrovisor inferior, donde se puede ver a los miembros del grupo. Emil consigue vengarse de que se le elimine de la foto de la contraportada y se incluye en una pequeña imagen abajo a la izquierda del volante. Tienes que fijarte muy bien, si no pasa desapercibido.



No es el mejor diseño del mundo, es verdad. Pero algún iluminado tuvo la feliz idea de eliminar la intención del diseño original. En las ediciones a partir de 1985: se cambia la imagen de la contraportada, por una foto del grupo en vivo y se elimina también el panel de mandos y la foto del salpicadero de la portada. Atento a la parte inferior de la imagen anterior y de esta. Podrás apreciar el cambio.



Pero la historia del diseño, aún tiene una vuelta de tuerca más. En 1999 surgieron unas absurdas polémica a raíz del libro autobiográfico de Wolfgang Flür donde habla de sus experiencias en el grupo. Esta situación provocó que se borrara de los créditos del disco a  Wolfgang. Pero es que además, en un giro inesperado en la reedición de 2009, se recuperó la fotografía original de la contraportada, ¡¡¡¡donde aparecía Emil Schult en lugar de Wolfgang!!!! Puedes comparar la imagen de la contraportada de más arriba y la siguiente imagen.

Contratapa reedición 2009 Autobahn Kraftwerk


La aportación de Conny Plank.

La última polémica viene a raíz de la segunda edición del citado libro de Wolfgang. Ralf y Florian consiguen parar la comercialización del libro de manera cautelar y Wolfgang comienza a recoger testimonios que refuercen las afirmaciones que expone en su libro. Una de esas entrevistas fue con la viuda de Conny Plank, verdadero motor del krautrock alemán y de la Neue Deutsche Welle, la nueva ola alemana de los años 80, ya que fue en sus estudio donde Autobahn fue grabado.

Según sus declaraciones, el grupo se aprovechó de su valía y no le pagaron adecuadamente. Al parecer nunca se sintió reconocido por ellos.

Escúcha y disfrútalo. En ocasiones no es un disco fácil, pero en eso reside parte de su grandeza, a medida que se va escuchando van apareciendo nuevos matices.



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